El fiscal Alejandro Gertz Manero está muy enojado. Y lo que le sigue... como dicen los señores.
Razones no le faltan al poderoso funcionario: lleva dos rounds perdidos contra su acérrimo archienemigo, el exconsejero jurídico de la presidencia, Julio Scherer Ibarra.
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El primero de esos reveses fue hace unos meses cuando la Corte decidió desechar el caso Alejandra Cuevas, sobrina del fiscal, dejándola a ella y a su madre, viuda de Federico Gertz Manero, libres de la cárcel y cesando la persecución judicial en su contra.
Ese fue un golpe durísimo para el titular de la FGR, pues la muerte de su hermano es uno de los temas que más lo han afectado y por ello intentó culpar judicialmente a su cuñada y sobrina de esa tragedia.
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Sin embargo, la mente detrás de esa resolución de la Corte fue Scherer, quien operó con ministros de la Corte para que la votación fuera contraria a los intereses del otrora todopoderoso fiscal.
El exconsejero jurídico supo calentar bien el terreno: previo a esa resolución de los ministros difundió una carta en la revista Proceso, fundada por su padre, en la que acusó a Gertz Manero y Olga Sánchez Cordero, en su papel de secretaria de Gobernación, de encabezar una red de extorsión y chantajes.
Ayer, la Fiscalía General de la República sufrió una nueva derrota: el juez Jesús Delgadillo Padierna sobreseyó (es decir, mandó a volar) el caso que el Ministerio Público federal tenía armado contra una serie de colaboradores cercanos a Julio Scherer Ibarra.
Durante la audiencia, el fiscal asignado al caso, Manuel Granados, lanzó una fiera argumentación en la que señaló de forma directa a Scherer de formar parte de una asociación delictuosa dedicada a la extorsión.
Aunque el exconsejero jurídico de AMLO no era imputado directamente, de haber procedido este caso se habría abierto la puerta para una inminente vinculación a proceso en su contra.
Sin embargo, el juez Delgadillo Padierna, quien es familiar de la morenista Dolores Padierna y fue quien logró meter a la cárcel a Rosario Robles, señaló que la investigación y las acusaciones de la Fiscalía carecían de fundamentos. Ergo, las bateó tan fuerte como Babe Ruth (o AMLO) en su mejor momento como beisbolista.
Ahora, la Fiscalía, furibunda, no sólo apelará el caso, sino que también busca armar un caso contra el referido juez.
Gertz Manero está enojado y va por el round definitivo: ¿la tercera será la vencida?