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VIOLENCIA DE GÉNERO

Parteras: Una alternativa de salud contra la violencia obstétrica y ginecológica

En México hay más de 15 mil parteras y no sólo luchan para acabar con la violencia obstétrica y ginecológica. También ayudan a las mujeres a reapropiarse de sus cuerpos, de acuerdo con la directora de Morada Violeta.

Las parteras contribuyen a combatir la violencia obstétrica y ginecológica que las mujeres enfrentan en los servicios de salud.
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Las parteras contribuyen a combatir la violencia obstétrica y ginecológica a las que las mujeres se enfrentan en los servicios de salud, de acuerdo con la directora clínica de Morada Violeta, Hannah Borboleta.

En México hay más de 15 mil parteras tradicionales y 100 más profesionales egresadas. Hannah Borboleta explicó, en entrevista con Grupo Fórmula, que, históricamente, las parteras han sido las expertas en salud sexual y reproductiva de las mujeres.

Por ello, agregó que se centran en el bienestar general de los cuerpos de las mujeres, sin realizar intervenciones innecesarias que puedan perjudicarlas.

Tres de cada 10 mujeres de 15 a 49 años que tuvieron un parto sufrieron algún tipo de maltrato por parte del personal médico que las atendió. 

Las entidades en las que se concentró este tipo de violencia fueron: Estado de México, Ciudad de México, Tlaxcala, Morelos y Querétaro, según la última Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares del Instituto Nacional de Geografía y Estadística.

El Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) señaló que la violencia obstétrica es una violación a los derechos humanos de las mujeres y de las personas con capacidad de gestar.

Además, consiste en cualquier acción u omisión por parte del personal del Sistema Nacional de Salud que cause un daño físico o psicológico durante el embarazo, parto y puerperio. Por lo que puede ocurrir en los servicios de salud públicos y privados.

Morada Violeta es una casa de partería con enfoque feminista, ubicada en la Ciudad de México. Se creó para proporcionar espacios seguros con atención digna, de calidad y calidez para las mujeres, destacó Hannah Borboleta.

¿Cuál es la diferencia entre una ginecobstetra y una partera?

La diferencia principal entre una ginecobstetra y una partera es la concepción que ambas tienen del cuerpo de las mujeres y de la salud, declaró la especialista.

Las parteras, detalló, no realizan procedimientos quirúrgicos como las ginecobstetras. Su trabajo está enfocado en ayudar al cuerpo a recuperar su equilibrio.

"¿Qué necesita ese cuerpo, esa mujer, esa alma, esa mente en su totalidad para estar bien? Estar bien también tiene diferentes significados en diferentes cuerpos y personas", resaltó.

En Morada Violenta las parteras brindan atención integral para infecciones vaginales, irregularidades en la menstruación, dolor menstrual, síndrome premenstrual, ovario poliquístico, miomas y endometriosis, embarazo, parto y posparto.

Asimismo, acompañan los procesos saludables de las mujeres, como la menarquía (primera menstruación) y la menopausia; proporcionan asesoría para la fertilidad, reproducción y no reproducción.

Igualmente realizan citologías cervicales (papanicolau) y otras pruebas de infecciones de transmisión sexual; dan  acompañamiento y asesoría si fuiste diagnosticada con Virus del Papiloma Humano; colocan y retiran DIU, y brindan asesoría sobre derechos sexuales y reproductivos. 

Por ello, la directora clínica señaló que sus citas gineco-holísticas duran una hora. Las parteras platican con sus consultantes sobre su estilo de vida, alimentación, estrés, cómo se sienten, quiénes son y qué es lo que buscan.

"Nos interesa conocer a las mujeres en su totalidad como persona y no solamente qué problema tienen en el cérvix", expuso.

A las citas les llaman gineco-holísticas porque no son ginecólogas; sin embargo,  consideran todos los factores que pueden incidir en la salud de las mujeres.

A pesar de que hay procedimientos que no realizan, Morada Violeta tiene una red con otras proveedoras de salud, como masajistas, psicoterapeutas, acupunturistas, ginecobstetras y más. De esta forma pueden procurar el bienestar completo e integral de las mujeres.

Hannah Borboleta comentó que durante su formación como parteras aprenden a ver a todas las mujeres como “individuas”. Por tanto hay pocas cosas que apliquen para todas y es importante encontrar lo que necesita cada una para sentirse bien.

Por otra parte, dijo que las parteras son expertas en partos saludables y destacó que el 85 por ciento de las mujeres embarazadas son candidatas a un parto asistido por ellas.

"En la partería vemos pocas complicaciones porque no nos enfocamos en esas complicaciones y no hacemos intervenciones que puedan causarlas. No vemos el cuerpo de las mujeres como el enemigo", afirmó.

Parteras contribuyen a la reapropiación de los cuerpos de las mujeres

Una consultante le dijo a Hannah Borboleta que desde que entró a la casa de partería de Morada Violeta sintió que iba a tomar té y a “echar el chal” con una amiga porque es un espacio acogedor. 

Aunado a ello, les permiten hacer todas las preguntas y dudas que tengan. Mientras que las parteras les indican en qué consiste la revisión, piden su consentimiento para tocarlas y dejan que las consultantes se inserten el espéculo para revisar el cérvix.

"Eso en general lo mencionan las mujeres como algo que les cambia la vida porque dicen: es que yo lo hice, nadie me lo tiene que hacer, y es un instrumento del que me pude apropiar cuando antes me daba terror", aseveró.

Hay consultantes que les han expresado que es la primera vez que salen de una cita ginecológica, en este caso gineco-holística, sin dolor, tensión o miedo.

El tipo de atención y consultas que dan permite que las mujeres resignifiquen experiencias traumáticas que vivieron cuando fueron víctimas de violencia ginecológica, de acuerdo con la partera, y eso es importante para sanar.

Las mujeres que son víctimas de este tipo de violencia pueden dejar de solicitar atención ginecológica por tiempos prolongados, resaltó; pues las han lastimado, regañado o maltratado psicológicamente.

El modelo de partería feminista está centrado en las mujeres, explicó, ellas son expertas en su vida y en tomar decisiones sobre sus cuerpos.

"Yo soy la experta en los procesos saludables de las mujeres y en algunos desequilibrios, infecciones vaginales por ejemplo. Tú has vivido en ese cuerpo desde hace varios años y tú sabes lo que es mejor para ti. Yo te doy los elementos para que tú puedas decidir y tomar las mejores decisiones para ti", concluyó la directora clínica de la casa que ofrece atención con parteras.