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La economía mexicana continuó con su recuperación y en el segundo trimestre de este año creció 1.5 por ciento con respecto al primer trimestre, sin embargo, fue menor a lo pronosticado originalmente por los analistas por el inicio de la tercera ola de contagios de Covid-19.
Los datos de la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) en México durante el segundo trimestre de este año, publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) muestran que el crecimiento de la economía fue impulsada por las actividades terciarias—relacionadas con el comercio, servicios y transportes—que avanzaron 2.1 por ciento entre abril y junio, con respecto a los primeros tres meses de este año, debido a que se trata del sector que tiene más peso en el PIB nacional.
Las actividades primarias—entendidas como aquellas relacionadas con la agricultura, pesca y ganadería—avanzaron 0.6 por ciento y las secundarias—manufactura, industria y minería—crecieron 0.4 por ciento en la variación trimestral.
En el comparativo anual—segundo trimestre de 2021 versus segundo trimestre de 2020—el crecimiento de la economía fue de 19.2 por ciento, mientras que en las actividades terciarias fue de 17 por ciento, las secundarias con el 28.2 por ciento y las primarias con el 6.8 por ciento, ocasionado por la baja base de comparación provocada por las restricciones a la movilidad en el inicio de la pandemia.
Al respecto, el presidente del Inegi, Julio Santaella, señaló en su cuenta de Twitter que con el crecimiento trimestral de la economía, aún no alcanza los niveles previos a la pandemia y apenas alcanzó un nivel similar al del cuarto trimestre de 2016, por lo cual su recuperación aún será prolongada en lo que resta de este año.
Sin embargo, el subgobernador del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, consideró que las estimaciones publicadas por el Inegi son negativas, debido a que su crecimiento trimestral fue menor al esperado, pues el Índice Global de Actividad Económica (IGAE) reveló que en abril la economía creció 0.18 por ciento, mientras que en mayo fue del 0.63 por ciento, pero en junio implícitamente su tasa fue de -1.9 por ciento, debido al repunte de casos de Covid-19 por la variante Delta que impactaron a partir del sexto mes de este año.
El economista en jefe para América Latina de Credit Suisse, Alonso Cervera, también coincidió en Twitter que el crecimiento trimestral del PIB estuvo muy por debajo de lo estimado, debido a que junio pudo ser un mes muy malo, y los crecimientos de abril y mayo pudieron ser menores a lo pronosticado, pero para agosto podrían crecer.
Por su parte, el director para América Latina de Moody´s Analytics, Alfredo Coutiño, señaló en su red social que la economía mexicana va en camino a crecer 6.5 por ciento, pues cuatro puntos serán de recuperación genuina y 2.5 puntos de efecto de base de comparación, aunque reconoció que la variación trimestral es de 1 por ciento en promedio.
Para el economista en jefe para México en HSBC, Alexis Milo, si bien el crecimiento a tasa anualizada de 6.1 por ciento en el segundo trimestre del PIB fue positivo, fue menor a lo estimado, por lo que fue impulsado por la reactivación de los servicios.
A su vez, la directora de análisis económico y financiero de Banco BASE, Gabriela Siller, mencionó en Twitter que la economía no está creciendo a un ritmo acelerado, sino que sólo está rebotando de la caída profunda que tuvo en el inicio de la pandemia.
La economía mexicana cayó 8.5 por ciento en 2020, el mayor retroceso desde 1932, por el inicio de la pandemia, sin embargo, diferentes organismos internacionales han sido optimistas sobre la recuperación del PIB y el Banco Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) han pronosticado que crecerá por encima del 6 por ciento al cierre de este año, aunque la variante Delta amenaza con perjudicar al sector económico con nuevas restricciones a la movilidad.