En el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, perteneciente a la zona metropolitana de Guadalajara, una camioneta de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco fue blanco de un ataque, lo que causó una posterior explosión y un incendio; el saldo preliminar es de tres muertos y 10 heridos, de acuerdo con información del gobernador Enrique Alfaro.
El mandatario de Jalisco precisó que en el ataque resultaron afectados elementos de la Policía Municipal de Tlajomulco y de la Fiscalía estatal, "Se trata de un hecho sin precedentes que pone de manifiesto de lo que son capaces estos grupos de la delincuencia organizada", apuntó.
Una de las primeras versiones extraoficiales apunta a que la camioneta donde viajaban los agentes de la Fiscalía pasó sobre una mina terrestre, lo que causó el estallido y la posterior deflagración. En tanto que otra de las hipótesis es que civiles armados arrojaron una granada al vehículo, mientras los oficiales realizaban un operativo.
El incidente se dio en el cruce de las calles de Flaviano Ramos y Abasolo, en la colonia Larios, ubicado en el norte del municipio de Tlajomulco, durante la noche de este martes. Equipos de emergencias de Jalisco se dirigieron al lugar para brindar primeros auxilios a las personas lesionadas y sofocar las llamas.
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De acuerdo con reportes extraoficiales, los agentes de la Fiscalía de Jalisco acudieron a realizar una serie de investigaciones, esto tras recibir un reporte sobre la presunta presencia de restos humanos en un terreno baldío. Los pobladores sólo escucharon un potente estallido, mismo que habría sido causado por algún artefacto explosivo.
Enrique Alfaro adelantó que el gabinete de seguridad se encuentra en sesión permanente y que la misma Fiscalía seguirá informando sobre este hecho, en tanto las investigaciones avancen y los datos sean confirmados. Personal del agrupamiento Tedax también colabora en las pesquisas.
En menos de un mes, agentes mexicanos han sufrido ataques con explosivos: el pasado 28 de junio, oficiales de la Guardia Nacional acudieron para atender un reporte de un vehículo abandonado en la localidad de Sauz de Villaseñor, perteneciente al municipio de Celaya; cuando hacían la inspección de rutina, el auto estalló, lo que dejó un saldo de una persona fallecida y al menos cuatro heridos.
Mientras que el pasado 21 de junio, en un camino de terracería del municipio de Apatzingán, una camioneta de la Guardia Nacional (GN) también fue atacada con explosivos, lo que dejó un saldo de ocho agentes lesionados, de acuerdo con datos ofrecidos por las autoridades de Michoacán.