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HISTORIA

El misterio del tesoro republicano del Vita que podría estar oculto en el Nevado de Toluca

Los vestigios de un tesoro escondido en aguas mexicanas muy profundas y heladas.

Los vestigios de un tesoro escondido en aguas mexicanas muy profundas y heladas.Créditos: Juan Carlos García
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El Tesoro del Vita, el barco cargado de oro y joyas que el gobierno de la Segunda República, trajo a México tras perder la Guerra Civil española podría estar oculto en las lagunas del Nevado de Toluca.

Los rumores y hallazgos de buzos deportivos sobre esta leyenda, llevaron a un equipo de arqueología subacuática del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México a emprender una exploración en las lagunas del Nevado de Toluca en el año 2010.

Aunque el enfoque de la expedición estaba en las culturas prehispánicas, como la inmensa mayoría de la arqueología que se realiza en el país, Roberto Junco Sánchez, el organizador, quería comprobar otra historia. 

“Nuestro equipo hizo transectos con un detector de metales, yendo de lado a lado en línea durante 50 metros, con lo que consigues una cobertura total del área, un bloque entero, y apareció un reloj, su carátula [esfera], con los números y alguna marca en la parte de atrás”, recuerda Junco Sánchez.

INAH

“Todo ese material nos lleva a pensar que se estaban deshaciendo de los restos tras extraer lo valioso, y que tiene que haber sido una actividad ilegal u oculta, porque, si lo puedes tirar a la basura de al lado de casa, para qué te tomas la molestia de ir hasta allá”, explicó.

Cabe destacar que el Nevado de Toluca está a unos cien kilómetros al suroeste de la Ciudad de México, y aún hoy, con un sistema de carreteras mucho mejor que hace ochenta años, se tarda más de tres horas en llegar a las lagunas.

Son dos masas de agua potable, la del Sol y la de Luna, de unos 17 y 12 metros de profundidad, respectivamente, situadas a 4 mil 300 de altura, lo que las ha convertido en un campo de pruebas perfecto para el buceo de altura. 

El expedicionario Sanchez aseguró que estas lagunas son de las más altas del mundo, por lo que al hacer pruebas ahí muy pioneras, empiezan a encontrar un montón de vestigios, sobre todo, prehispánicos, pero también maquinaria de relojes de bolsillo, “carátulas y unas cajitas en las que se lee ‘Monte de Piedad de Madrid’, que se pueden ver en el Museo de Rescates Subacuáticos de Quintana Roo”. 

La travesía del Vita

El origen del Vita se ubica en la Guerra Civil española, cuando tras años de enfrentamiento, el gobierno republicano reunió una serie de recursos que al notar que se acercaba el final de la lucha y que la ganaría el bando franquista, trasladó el barco a Francia.

El conjunto del tesoro eran joyas de depósitos privados del Banco de España y del Monte de Piedad de Madrid, monedas de oro, reliquias de la catedral de Toledo, un relicario con uno de los supuestos clavos de Cristo y una valiosa edición del Quijote.

De acuerdo con Aurelio Velázquez, doctor en Historia por la Universidad de Salamanca, investigador de Historia Contemporánea en la UNED, el tesoro estaba guardado en unas minas de sal en Gerona, y lo fueron sacando de forma irregular en una avioneta a Francia. 
El tesoro abandonó Francia en febrero de 1939 en total clandestinidad y distribuido entre 110 y 174 maletas, aunque se estima que eran 151, a bordo de un yate  de recreo de 62 metros de eslora “El Vita”, que salió rumbo a Veracruz, a donde llegó en marzo de 1939.

El yate fue desviado a Tampico e Indalecio Prieto vació la carga con autorización del gobierno mexicano para trasladarla después a la Ciudad de México, relató el periodista mexicano profranquista Alfonso Junco Voigt, que mantuvo variadas polémicas con Prieto.

Aunque Prieto con habló directamente con Cárdenas y lo convenció para permitir el  desembarco y trasladarlo a la capital, luego se desentendió por lo que tuvo que deshacerse de las joyas y se compró una casa en la avenida Michoacán, número 64, en la colonia Roma, donde se instaló un taller de desguace.

El cadáver de un tesoro

El oro, la plata y las monedas del tesoro fueron vendidos al Banco Central de México a un precio ventajoso para esta institución; las piedras preciosas, a los joyeros internacionales Isidoro Lipschutz y Victor Urbach; el platino y otros materiales, al joyero mexicano Ángel Mijares; y el barco, finalmente, al gobierno de Estados Unidos. 

Como resultado, se obtuvieron cerca de 8,5 millones de pesos mexicanos y unos 5,6 millones de dólares, de aquel entonces; aunque su valor estaba estimado en 40 millones de dólares en condiciones más favorables.

No obstante, el taller de la calle Michoacán 64 generaba restos, “cadáveres”, las partes no no valiosas como la maquinaria y las cajas que contenían los objetos de valor y habría que deshacerse de las pruebas del tesoro, que salió de España de forma ilegal, sin pasar aduanas y sin pagar impuestos. 

Esferas del reloj halladas en las lagunas. INAH

“Si te pones a pensar que esto ocurrió en los años cuarenta, el Nevado de Toluca era una opción, ya que nadie pensaba en esa época que diez años después Cousteau iba a revolucionar el mundo del buceo”, razona el arqueólogo Roberto Junco Sánchez. 

“Es un lugar cercano a la Ciudad de México, pero de difícil acceso, y se pensaba que sus lagunas eran profundísimas y que se conectaban con el mar, con aguas heladas”, indicó.

Esta opinión es compartida por Velázquez, quien describe el Nevado de aquellos tiempos como “un gran lugar para tirar algo y que nadie lo encuentre”. 

“Todo ese material, el hecho de que sean envoltorios, maquinarias, un relicario..., nos lleva a pensar que se estaban deshaciendo de los restos tras extraer lo valioso. También tiene que haber sido una actividad ilegal, y lo tiraron cerca de la orilla”, relató Junco Sánchez, quien pudo comprobar las historias de los buzos.

“Encontramos materiales muy similares a los que ellos cuentan, aunque no podemos asegurar que sean del Vita”, admite el organizador de la expedición con la esperanza de encontrar una esfera de reloj con el número de serie para poder ir a Suiza, al Monte de Piedad y hasta su tumba en la laguna del Sol.