Las personas que no se hayan vacunado contra el COVID-19 en Jalisco deberán pagar, literalmente, por su decisión. Al menos los que por voluntad no lo han hecho, pues para entrar a actividades recreativas, el gobernador, Enrique Alfaro, explicó que se pedirá prueba PCR privada para aquellos que no tienen ninguna dosis; los que ya, sólo deberán mostrar el certificado de vacunación.
"Estamos dejando una alternativa para aquellos que, desde mi punto de vista, de manera inexplicable, deciden no vacunarse puedan acudir a estos lugares, pero presentando una prueba PCR que además tiene que pagar ellos pues no pueden ser a través del sistema de pruebas que tiene el sector público", explicó Alfaro en entrevista con Ciro Gómez Leyva al tiempo que no estimó una fecha exacta para la finalización de esta medida pues quiere incentivar a los que no tienen alguna dosis.
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El mandatario explicó que el esfuerzo se hace ya con muy poco margen de maniobra en la pandemia por COVID-19, por ello apelarán al compromiso ciudadano y a la colaboración de los dueños de casinos, bares, antros, estadios, conciertos, salones de eventos, centros de convenciones y eventos masivos que deberán vigilar a quienes entren a sus establecimientos.
A las personas vacunadas mayores de 18 años, se explica en el sitio web del gobierno, ya sea con esquema completo o sólo con una dosis, podrán mostrar el certificado federal, la papeleta de vacunación entregada en Jalisco, el comprobante de vacunación emitido en Estados Unidos o cualquier otro país para entrar a dichos sitios.
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Mientras que las personas mayores de edad que no cuentan con alguna de las dosis, deberán entregar una prueba RT-PCR que tenga una vigencia de 48 horas y serán acreditadas sólo las que Cofepris autorizó en su página web.
El gobernador explicó que en Jalisco ya se cuenta con alrededor del 85 por ciento de la población vacunada, pero denunció que la campaña de inmunización se encuentra estancada desde hace un mes.
Por ello, han optado por esta medida ante el alza de casos, cuyo pico esperan a finales de enero, de acuerdo con estimaciones de la Universidad de Guadalajara.