Finalmente, el Gobierno Municipal tuvo que salir a dar la cara para decir que sí se perdió una tonelada de medicamento por caducidad, pero fue donado por el Hospital Militar, y solo el 10 por ciento era para atender el Covid y el 90 por ciento para otras enfermedades.
En conferencia de prensa, acompañado del secretario del Ayuntamiento, Edgar González Zatarain, el director de Hospitalito Municipal, Eddy Samuel Ramos Aragón, explicó que ese medicamento fue donado al Ayuntamiento en noviembre de 2021, y para febrero y marzo estuvo ya caducando, por lo que rechazó que hubiera habido un acto de negligencia como se quiso dar a conocer.
“En noviembre del 2021, el año pasado, muchos hospitales públicos tuvieron mucho medicamento que estuvo por caducar, uno de los mecanismos que usan las instituciones públicas para que no se caduque el medicamento es donaciones, entonces, en este caso el Hospital Militar de la ciudad, tenía un medicamento que estaba próximo a caducarse por eso damos a entender que es de dos a tres meses que iba a caducar el medicamento. Nosotros recibimos esta donación en un acto de buena fe de ver la posibilidad de utilizar estos medicamentos”, explicó.
Reconoció que se caducó ese medicamento, sobre todo porque esta vez no realizaron jornadas médicas ni dieron apoyos a dispensarios por lo de la pandemia, que es cuando lo puede aprovechar la ciudadanía.
Agregó que mucho de ese medicamento donado por el Hospital General no coincidió con las necesidades de los mismos pacientes, por lo que tuvieron que darlo de baja por los procedimientos administrativos. Dijo desconocer el costo que tuvo que pagar el Ayuntamiento por deshacerse de este medicamento caduco.
Sobre los señalamientos del alcalde Luis Guillermo Benítez Torres de que se iba a proceder legalmente contra personal sindical sorprendido que estaba haciendo mal uso de medicamento, el secretario del Ayuntamiento, Edgar González Zatarain indicó que se está en proceso de investigación y no quiso abundar mucho, para que no se les caiga el caso.
El doctor Ramos Aragón agregó que gracias a las 10 cámaras de videovigilancia que se instalaron, pudieron darse cuenta de un solo empleado, que no dijeron si era administrativo o sindicalizado, quien fue sorprendido hasta el momento, evitando los comentarios y sin abundar en declaraciones.