La presidenta municipal, Verónica Delgadillo, afirmó que se trata de una obra histórica que transformará el primer cuadro de la ciudad y mejorará la calidad de vida de las y los tapatíos-
“Estamos rehabilitando el Centro Histórico atendiendo las necesidades del presente, pero también proyectando su funcionamiento para el futuro”, expresó.
Las primeras etapas del proyecto contemplan la intervención en Plaza Liberación, Plaza Fundadores y la Fuente Cabañas, así como el corredor turístico que conecta con el Instituto Cultural Cabañas y los estacionamientos subterráneos de la zona. El titular de la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública del estado, David Zamora, explicó que, aunque habrá cierres parciales, el Centro no se detendrá pues se ubicarán zonas para garantizar el tránsito seguro de peatones y la operación continua de espacios como el Teatro Degollado, el Congreso del Estado y el Palacio de Gobierno.
Para garantizar la continuidad de las actividades, el gobierno municipal realiza labores de socialización con 10 sectores directamente afectados: boleros, comerciantes, artistas urbanos, artesanos, autoridades eclesiásticas, museos, el Poder Judicial, el Congreso del Estado, el Teatro Degollado y la Universidad de Guadalajara. Algunos sectores ya han comenzado a ser reubicados temporalmente, como los boleros y artistas urbanos, quienes operarán en espacios como la explanada del Santuario, el Mercado Corona y el Jardín Reforma.
Las autoridades destacaron que el objetivo es convertir el Centro Histórico en el “corazón más bonito de México”, sin detener su vida cotidiana.