Cuando se piensa en la decoración, no solo se debe pensar en la estética, sino también en la energía que ciertos objetos atraen.
Tal es el caso de los espejos, los cuales pueden ser indispensables en ciertos hogares, pero hay espacios en la casa donde no los debes colocar, como en la entrada. Hoy te contaremos por qué nunca debes colocar espejos enfrente de las puertas de la casa.
¿Por qué no se deben poner espejos frente a las puertas?
De acuerdo con Astrid Izquierdo, experta en Feng Shui, los espejos son elementos que son armas preciadas en la decoración de espacios limitados, porque dan sensación de amplitud y luminosidad.
Sin embargo, colocarlos en un lugar equivocado puede hacer que nuestro hogar se contamine de energía negativa. Por esta razón, nunca debemos poner espejos frente la puerta principal.
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Colocar un espejo delante de la puerta, reflejará el exterior, lo que muchas veces es la casa del vecino, espacios públicos, etc.
Esto afecta porque se mezcla la energía, y una regla del Feng Shui es no dejar que la energía del exterior entre a tu hogar y lo contamine, ya que es sagrado.
¿Cómo deben ir los espejos en las entradas a casa?
Si tienes un espejo posicionado en la entrada de tu casa, y te gusta como se ve o simplemente no lo puedes quitar, te recomendamos colocar una mesa o repisa cerca, para que puedas agregar elementos que eviten que se refleje el exterior.
Por ejemplo, puedes colocar un jarrón con flores grandes y vistosas, las cuales no solo aportarán a la energía positiva de tu casa, sino que también impedirán que se refleje el exterior en el interior de tu hogar.
Así que, ya sabes por qué los espejos nunca deben ir enfrente de las puertas de entrada, y qué puedes hacer para solucionarlo, según el Feng Shui.