Así debes desinfectar tu esponja de trastes para evitar bacterias y malos olores

Es importante mantener una adecuada limpieza de las esponjas que usas para lavar trastes, pues esto evitará que se reproduzcan las bacterias y te enfermen a ti o a otras personas que usan tus platos, vasos y ollas. 

Por ello hoy te vamos a contar sobre un remedio recomendado por Mariana Zapién, una ingeniera en alimentos que publica contenido en sus redes sociales para informar a sus seguidores y seguidoras.

Lo especialista explica que es necesario mantener tu esponja limpia también para evitar malos olores. Lo único que debes hacer es seguir los siguientes pasos:

1. Cuando termines de usar tu esponja debes lavarla con agua para eliminar cualquier resto de comida. 
2. Después agrega jabón de trastes y el siguiente paso será tallarla muy bien para poder eliminar cualquier tipo de suciedad o residuo de alimento. 
3. Enjuágala muy bien de todos los restos de jabón, posteriormente será necesario exprimirla. 
4. Una vez que se eliminó el exceso de agua de la esponja es momento de preparar la solución desinfectante la cual vas a alistar colocando 60 ml de cloro por cada 1.8 litros de agua. 
5. Mete la esponja en la solución (lo ideal es usar algo pesado encima de ella para que permanezca sumergida). 
6. Después de cinco minutos debes remover la solución y exprimir la esponja.
7. Posteriormente déjala secar en una superficie limpia.

La ingeniera en alimentos explica que también puedes sanitizar tu esponja usando nada más y nada menos que tu horno de microondas.

Lo único que debes hacer es, después de lavar la esponja con jabón, colócala en el microondas por un minuto a máxima potencia. 

"Recuerda que la esponja debe estar húmeda para que esto funcione. Después la secas en una superficie limpia y listo", sentencia el video. 

Si eres de aquellas y aquellos que deja su esponja en el recipiente con jabón, cuidado, pues esto podría provocar el desarrollo de bacterias. Recuerda que también es importante cambiarla regularmente, más o menos cada dos o tres semanas, de esta forma mantendrás tus trastes limpios y tu organismo sano.