A la fecha se desconoce con precisión el origen del vino tinto, el cual ha acompañado a la humanidad desde sus inicios, pero lo que sí se sabe es que beber una copa de esta bebida milenaria al día brinda grandes beneficios al cuerpo y a continuación te decimos cuáles son.
Recuerda que esta bebida sólo traerá beneficios a tu salud si la consumes moderadamente, de lo contrario provocaría daños en tu cuerpo, pues afectaría principalmente a tu sistema nervioso o al hígado.
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Médicos recomiendan beber una copa de vino tinto al día para obtener los siguientes beneficios:
Reduce el riesgo de sufrir un paro cardiaco
Las uvas contienen antioxidantes que pueden ayudar a prevenir la producción de coágulos y protegen los tejidos de los vasos sanguíneos, señala un estudio de la Universidad de Harvard.
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La investigación determinó que aquellas personas que consumen vino de manera moderada tienen un 30 por ciento menos de probabilidades de sufrir un infarto.
Ayuda a evitar la depresión
Estudios de la Universidad de Buffalo y otras de España señalan que una copa de vino tinto contiene la dosis necesaria de resveratol para estimular la felicidad y combatir los síntomas causados por la ansiedad y la depresión.
Previene la ceguera
El resveratrol también protege la visión, ya que detiene el crecimiento de los vasos sanguíneos fuera de control en el ojo (angiogénesis) que causa la ceguera, señala un estudio de la Escuela Universitaria de Medicina de Washington en St. Louis, en Estados Unidos.
Ayuda a perder peso
Tomar una copa de vino tinto después de la comida o antes de dormir te podría ayudar a perder peso, debido a que facilita el proceso digestivo e impide la formación de células grasas en el organismo.
Así que tomar una copita, además de ayudar en el proceso digestivo, puede ayudarte a mantener una dieta más saludable.
Disminuye el colesterol
El vino tinto, por sus amplias cualidades, mejora la salud cardiovascular, debido a que disminuye la concentración de placas aterogénicas en las arterias y aumenta los niveles de HDL o colesterol bueno.
Las placas aterogénicas, también conocidas como estrías grasas, son lesiones asintomáticas que son causadas por placas de grasa generadas en las arterias.
Ahora ya sabes que puedes beber una copa de vino tinto al día sin remordimientos y por el bien de tu salud.
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