La época del Cine de Oro trajo gloria a México, así como a los artistas que formaron parte de los filmes desarrollados en ese periodo cinematográfico. Tal fue el caso de Isabel del Puerto.
El verdadero nombre de la bella intérprete era Elisabeth von Hortenau y nació en Viena el 7 de agosto de 1921; durante su juventud, y tras una breve estancia en Broadway, llegó a nuestro país.
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Su porte la orilló iniciarse como modelo de los almacenes Salinas y Rocha, posteriormente, llamó la atención de los directores y comenzó a actuar en renombradas producciones.
Entre sus más destacadas películas se enlistan “Nunca besaré tu boca” (1947), “Mi madre adorada” (1948), “Una familia de tantas” (1949), “Medianoche” (1949) y “Hay lugar para... dos” (1949).
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Isabel del Puerto no sólo era artista, pues pertenecía a una familia real dado que su madre era parte de la Casa de Habsburgo de Austria. Un dato curioso es que de ese mismo linaje eran parte Maximiliano y Carlota.
¿Por qué Isabel del Puerto dejó el cine de Oro para comenzar a vender casas?
La actriz de origen europeo no sólo desempeñó papeles para la pantalla grande durante su estancia en México, pues destacó en varias disciplinas artísticas como el baile y la escritura.
Aunque le iba bien de la mano del Cine de Oro, ella abandonó la industria del espectáculo para convertirse en periodista, fotógrafa y en mujer de negocios.
Resulta que la integrante de la Casa de Habsburgo de Austria consiguió una licencia para vender bienes raíces tanto en México como en Estados Unidos, debido a eso pudo vender casas por 70 años.
Aunque su desempeño en los negocios distaba de su participación como actriz del Cine de Oro mexicano, Isabel del Puerto logró mantenerse y vivir cómodamente gracias a sus habilidades en el mundo financiero hasta que murió en 2014, a consecuencia de una embolia.