Cultura

INAH

Encuentran sitio de cazadores de hace más de 9 mil años en Oaxaca

Una excavación arqueológica identificó una cueva, utilizada por seres humanos, en los periodos Precerámico y el Posclásico

Se recuperaron materiales cerámicos, artefactos líticos tallados, restos botánicos y huesos de animales con huellas de exposición al fuego
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El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) emitió un comunicado donde reveló el hallazgo de un sitio en el que había cazadores.

De acuerdo con el descubrimiento, se encontró “una gran cantidad de sedimentos” que lo resguardó por más de 9 mil años, siendo una evidencia tangible en la Cueva de la Paloma, en el Valle de Oaxaca.

La cueva data del periodo Posclásico (1276 a 1390 d.C.) y fue resultado del proyecto arqueológico Paisaje y Arte Rupestre y Ocupación en las Cuevas Prehistóricas del Valle de Oaxaca (PAROCVO) que fue implementado por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del INAH y con apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Patrimonio Cultural por la UNESCO

Los investigadores refirieron que esta zona del Valle de Tlacolula, área declarada como Patrimonio Cultural por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y las Culturas, no había sido explorada.

De igual forma, La Cueva de la Paloma está en el Área Destinada Voluntariamente a la Conservación El Fuerte, cerca de Guilá Naquitz, lugar donde hallaron restos de bule y calabaza de 10 mil años (en 1960), siendo estas la evidencia de planta doméstica con mayor antigüedad descubierta en América.

En el piso de la cámara de La Cueva está en buen estado de conservación y encontraron fragmentos de recipientes cerámicos e instrumentos de molienda y un fogón.

Ante el registro del lugar se afirmó que La Cueva si presenta ocupaciones asociadas con grupos de cazadores-recolectores. 3 mil 500 años después el sitio fue ocupado por Zapotecos para depositar ofrendas, como se analizó con el par de vasijas miniatura y un cántaro cubierto por un cajete, a modo de urna.

Gabriela Domínguez Vázquez, investigadora de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, ha identificado, al menos, 40 especies como yuca, guayaba, chile, quelite y epazote.

Es decir “fundamento de la dieta de estos grupos, aun cuando ya tenían conocimiento de algunas especies domesticadas”, dijeron los integrantes del PAROCVO.

Esto hace que la zona se considere por los arqueólogos como la más importante de la región para el estudio, la conservación y difusión de los sitios más antiguos en el Valle de Oaxaca.

Los integrantes de esta investigación son Carlos Viramontes Anzures, Jesús Eduardo Medina Villalobos y Claudia Jael Jiménez Mu, quienes dieron a conocer su segunda temporada de campo en 2022 en donde se realizó una excavación de más de 40 metros de ancho por 20 de profundidad y que en ciertas zonas alcanza una altura máxima de 6 metros.