CDMX

PASEO DE LA REFORMA

La Palma está 'enfermita' y moribunda: chilangos le dan el último adiós

La Glorieta de la Palma enfrenta sus últimas horas recibiendo mucho cariño de las y los capitalinos, en un día bello y soleado.

Chilangos acudieron a la Glorieta de la Palma a despedirse de ella.Créditos: Héctor Gutiérrez Trejo
Escrito en CDMX el

Un ambiente de tristeza recorre a la Ciudad de México: una de sus habitantes más celebres se encuentra agonizante, la histórica palmera enfrenta sus últimas horas de vida. La Glorieta de la Palma cambiará en unas horas el paisaje de Paseo de la Reforma para siempre.. y las y los chilangos la despiden con amor.

¿Se debe poner una estatua de un político? Juana González pega el grito en el cielo ante dicha pregunta;  "No, políticos no por favor. A mí me gustaría que pusieran una jacaranda u otra palmera", alega la señora, la cual es una de la docena de capitalinas y capitalinos que se apersonaron en el icónico lugar para darle cariño al árbol con más de 100 años de vida.

Se toman selfies, videos... y abrazan y tocan el tronco por última vez antes de que este domingo sea retirada para siempre de la glorieta. Niños se corretean al rededor de la antigua señora, que los mira por última vez. Podrán presumirle a sus nietos, aún no nacidos, que antes ahí había una palmera muy famosa, que se murió a causa de una enfermedad.

¿Ni de AMLO?, se le insiste. "Uuuuy, mucho menos de ese señor", agrega la señora González. 

A la palmera ya se le notan los años y la enfermedad. Luce seca, sin vida. Luce triste. Pero las y los capitalinos la apapachan y le dan cariño antes de que se enfrente a lo inevitable. Ese horrible destino que nos aguarda a todos los seres vivos: seamos planta, bacteria o animal, la muerte siempre nos aguardará al final del camino.

Abejas que persiguen a los descuidados que llevan un helado o refrescos azucarados destapados. Flores rosas que demuestran que la vida, como dice una gran canción de reggaeton, es un ciclo, y automovilistas enojados que están tan acostumbrados al olor de la gasolina que aprovechan para insultar a los viandantes que cruzan el tramo que va de la Bolsa de Valores a la glorieta. Todo bajo un sol que achicharra a turistas incautos que no se pusieron bloqueador en su blanca piel.

Así es la estampa sabatina que atestigua el final de la palmera. Su último día fue un día hermoso. 

"Por una parte está bien, porque ya son muchos años, tiene muchas enfermedades, es como cuando llevas a dormir a una mascota, para qué tenerla sufriendo si es mejor replantearte la idea de quitarla y poner otra cosa", señala, triste, Mario Landeros. Un joven que se despidió del árbol junto a su mamá.

"Le comenté a mi mamá hace unos días, por qué no hacemos una colecta de llaves y hacemos una palmera con ellas y la ponemos aquí", agregó el joven.

La palmera es muy amada.

 

¿Qué opinan las y los chilangos de que se quite la palmera?

Aunque les duela tener que despedirse de la palmera, las y los capitalinos están conscientes de que es la mejor decisión. La palmera está sufriendo y lo mejor es que tenga un final digno.

La naturaleza, apuntaron, es la naturaleza. Todos nos enfermamos y todos morimos.

"Me apena, pero si es necesatrio, adelante, tiene mucha historia, ha visto muchas cosas en la ciudad, pero está 'enfermita'", dijo Zulema Morales.

"Pues por qué no, si se pudiera poner otra palmera, sería padre. Hay muchas que quizá sean más viables en este caso. Es un nombre  súper conocido para todos, un punto estratégico y central de la Ciudad".

La Glorieta de la Palma ha visto 100 años de historia de la capital: amores consumados, romances imposibles, desfiles militares, a presidentes del PRI, PAN y de Morena. Marchas estudiantiles, marchas feministas, marchas obreras. Todos asumimos que siempre estuvo ahí y que siempre estaría ahí.

Ahora, la palmera enfrenta sus últimas horas en su último día.

¿Qué enfermedad tiene la palmera?

La palmera que embellece la famosa Glorieta de la Palma, en el emblemático Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, será podada este domingo debido a que tiene una plaga conocida como "hongo de la pudrición rosa de las palmeras", así lo informó el Gobierno de la CDMX. 

Debido a lo anterior, habrá algunos cambios como el nombre y la planta que estará en la glorieta de Reforma, cuya palmera llevaba más de 100 años de existencia. 

En cuanto a la sintomatología, los expertos indicaron que la enfermedad provoca pequeñas manchas necróticas, de color marrón, en la base de los peciolos, que es lo que une a las hojas con los tallos, así como pequeñas salidas de un líquido "de goma".

Posteriormente, mencionaron que cuando hay humedad elevada se produce la reproducción del hongo, con los "típicos recubrimientos de un polvillo rosado sobre el tejido atacado", provocando la muerte de las hojas.

Dicha enfermedad en una etapa avanzada produce muerte prematura de las hojas más jóvenes, así como la pudrición interior del cogollo y termina con la muerte de la planta, en este caso; la palmera.